«Pueden ser antropósofos quienes sienten determinadas cuestiones sobre la esencia del hombre y del mundo como una necesidad tan vital como la que se siente cuando tenemos hambre y sed»:

Con estas palabras Rudolf Steiner ponía bien alta la barrera de entrada a quienes desearan iniciarse en la disciplina, con un nivel de exigencia similar al de las antiguas religiones mistéricas.

Steiner defendía que toda religión es válida y verdadera en el tiempo y contexto cultural en el que nace, y que las formas históricas del cristianismo necesitan ser transformadas considerablemente en nuestro tiempo para acompañar la evolución de la humanidad.

En su obra Cómo se adquiere el conocimiento de los mundos superiores, publicada en 1904, ofreció una de las exposiciones más lúcidas e inspiradas del camino de evolución espiritual del ser humano.

«Todo conocimiento que busques meramente para enriquecer tu propio saber y para acumular tesoros personales, te desviará del sendero; pero todo conocimiento que busques para madurar en la tarea del ennoblecimiento humano y de la evolución cósmica, te hará adelantar un paso más.»

Rudolf Steiner (1861-1925), nació en el pequeño pueblo de Kraljevec, Imperio austrohúngaro (ahora en Croacia), donde creció. Cuando era joven, vivió en Weimar y Berlín, donde se convirtió en un erudito científico, literario y filosófico con muchas publicaciones, conocido especialmente por su trabajo con los escritos científicos de Goethe.
A principios del siglo XX, comenzó a desarrollar sus primeros principios filosóficos en un enfoque de la investigación sistemática de los fenómenos psicológicos y espirituales. Comenzando formalmente su carrera de enseñanza espiritual bajo los auspicios de la Sociedad Teosófica, Steiner llegó a usar el término Antroposofía (y ciencia espiritual) para su filosofía, investigación espiritual y hallazgos.

La influencia del genio multifacético de Steiner ha llevado a enfoques innovadores y holísticos en medicina, varias terapias, filosofía, renovación religiosa, educación Waldorf, educación para necesidades especiales, economía triple, agricultura biodinámica, ciencia goetheana, arquitectura y las artes del drama, el habla. y euritmia. En 1924, Rudolf Steiner fundó la Sociedad Antroposófica General, que hoy tiene sucursales en todo el mundo. Murió en Dornach, Suiza.